Se ha publicado un informe de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, en el que se hace un llamamiento sobre el creciente problema de la resistencia a los antibióticos. Se ofrecen datos generales sobre las infecciones y las muertes asociadas a los microorganismos que han generado resistencia; los resultados son motivo para que de una vez por todas se regule el uso de estos fármacos en los animales productores de alimentos.
Más de 2 millones de personas sufren una infección que resiste a la acción de los antibióticos y al menos 23.000 personas mueren por esta causa. Más del 20% de estas infecciones han sido causadas por agentes patógenos transmitidos a través de la alimentación, pero quizá las cifras sean mayores, ya que el CDC explica que son estimaciones mínimas en base a los datos que disponen.
El uso de antibióticos en animales en Estados Unidos está pasando factura, recordemos que en el año 2011 nos hacíamos eco en el post Carne contaminada en Estados Unidos, de un estudio que ponía de relieve que hasta un 25% de los diferentes tipos de carne que se comercializaban en cinco ciudades del país estaban contaminadas por bacterias. En un 47% de las muestras recogidas indistintamente del tipo de carne, se identificó una cepa de Staphylococcus aureus o estafilococo áureo, bacteria anaerobia causante de enfermedades como la neumonía, la sepsis, la meningitis, la osteomielitis, etc.
De la carne infectada, en un 52% se detectó una cepa resistente a los antibióticos. Desde hace bastante tiempo se pide regular el uso de antibióticos en los animales; como sabemos, se utilizan como medida de prevención para evitar que los animales enfermen.
Algunos estudios determinaban que la probabilidad de la utilización de antibióticos con carácter no terapéutico en la alimentación, era hasta ocho veces mayor que en el tratamiento de animales enfermos.
A finales del año 2011 podíamos saber que Estados Unidos no legislaría el uso de antibióticos en la alimentación animal,
la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos) decidió no retirar la penicilina y las tetraciclinas (grupo de antibióticos) de la alimentación animal, por lo que se mantendría la utilización de antibióticos con carácter no terapéutico en la alimentación de los animales, y esto a pesar de los riesgos de que los patógenos pudieran generar resistencia a los antibióticos poniendo en riesgo la seguridad alimentaria, algo que está más que constatado.
La CDC explica que las bacterias evolucionan para sobrevivir a los antibióticos y a todo lo que represente una amenaza, en este caso hablamos de la alimentación animal, pero existen otras vías que facilitan que se genere resistencia, de ellas nos habla el informe del CDC, pero nos centraremos en el canal alimentario.
Se explica que hasta el 80% de los antibióticos que se comercializan en el país los utiliza la ganadería, y a rebaños enteros se les administran pequeñas dosis en la alimentación durante largos periodos de tiempo. Uno de los motivos argumentados es que de este modo se contrarrestan las condiciones de crianza insalubre de estos animales.
Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades, reitera que el uso de antibióticos en animales es innecesario e inapropiado, pone en riesgo la salud humana y son muchos los estudios que lo demuestran. Claro, que los ganaderos no están dispuestos a abandonar su sistema de crianza y si este es insalubre, seguirán utilizando los fármacos con fines no terapéuticos.
El CDC concluye que debido a la relación entre el uso de antibióticos en animales productores de alimentos y la aparición de infecciones resistentes a los antibióticos en seres humanos, se ha de evitar su uso. Sólo se deberían administrar bajo supervisión veterinaria y únicamente en el caso de enfermedad o infección, como método preventivo debería estar prohibido.
El uso de los fármacos no debe tener como meta el crecimiento de los animales obviando sus condiciones sanitarias. Los expertos siguen esperando a que de una vez por todas la FDA libere el reglamento conocido como Directiva RSS Veterinaria, en él se obliga a la supervisión veterinaria en el uso de antibióticos en la alimentación del ganado.
La verdad es que la FDA no hace más que decepcionar una y otra vez, recordemos la postura que mantiene sobre la definición del término “natural” en los alimentos, de ello hablábamos en el post La FDA pierda credibilidad por ignorar los problemas del etiquetado alimentario, pero también ha defraudado en otras cuestiones, recordemos el caso del salmón transgénico, y tantos otros que podemos citar, no parece una agencia responsable de la regulación de alimentos y medicamentos. El CDC espera que el Congreso estadounidense apruebe una ley que prohíba el uso de los antibióticos importantes en la alimentación de los animales.
El informe realizado es muy extenso y nos proporciona todo tipo de datos y detalles sobre el problema, así como las medidas que se deben adoptar para luchar y prevenir la resistencia de las bacterias a los antibióticos, podéis conocer todos los detalles a través de este enlace. ¿Servirá de algo este informe?, ¿legislará sobre el tema el congreso?, ¿seguirá la FDA manteniendo una actitud un tanto indiferente?
AUTOR: VelSid, 22/09/2013. FUENTE: http://gastronomiaycia.republica.com/