Se inicia el programa de fumigación aérea para acabar con los mosquitos
El Gobernador de Florida, conjuntamente con los agentes federales de salud pública, decidieron que había que realizar fumigaciones aéreas de pesticidas. A pesar de que el mosquito Aedes aegypti no se desplaza más allá de 100 metros de distancia de su lugar de eclosión, en este caso en la zona de Wynwood, donde se han encontrado los casos autóctonos de Zika, las autoridades decidieron rociar un área de unos 26 km2, sólo para estar seguros28.
Un programa de fumigación aérea que cubre unos 26 km2 fue una noticia bastante sensacionalista para los medios de comunicación. Algo mucho más alarmante que realizar una fumigación aérea en una zona residencial. También supone la exposición de muchas personas a pesticidas tóxicos (más información sobre esto más abajo).
La primera fumigación aérea se realizó el 4 de agosto de 201629.
Los tóxicos pesticidas utilizados en las fumigaciones aéreas pueden producir microcefalia
Las autoridades dijeron a la gente que no había motivo de preocupación por las sustancias que se estaban fumigando, porque el Naled resulta inofensivo. Hicieron referencia a los Informes de la EPA, que apoyaba sus decisiones30.
Pero no mencionaron que el Naled fue prohibido en Europa en el año 2005. No mencionaron que las autoridades de Puerto Rico se negaron a permitir las fumigaciones con Naled sobre sus ciudadanos. No mencionaron que el Naled también mata otros muchos tipos de insectos y criaturas acuáticas, además de los mosquitos31. Pero lo más importante: las autoridades no mencionaron que el Naled y los productos químicos que se forman por su degradación en el medio ambiente tienen el potencial de provocar defectos de nacimiento en los humanos32.
[Véase por ejemplo: ¿Es seguro el Naled?]
¿Podrían pesticidas como el Naled ocasionar microcefalia y otras enfermedades que amenazan la vida?
Las autoridades no mencionaron que este pesticida con el que estaban rociando zonas residenciales densamente pobladas de Wynwood32 es particularmente peligroso para los bebés que se encuentran en el útero.
Esto es lo que dice la revista Journal Of Pesticide Reform acerca del naled:
“Como todos los organofosfatados, el Naled (Dibrom) es tóxico para el sistema nervioso. Los síntomas por la exposición incluyen dolores de cabeza, náuseas y diarrea. El Naled es más tóxico cuando la exposición se produce al respirar aire contaminado que cuando se trata de otros tipos de exposición.
En pruebas de laboratorio, la exposición al Naled aumentó la agresividad y produjo un deterioro de la memoria y el aprendizaje.
El producto de descomposición del Naled es el diclorvos (otro insecticida organofosfatado) que interfiere en el desarrollo del cerebro en la fase prenatal. En animales de laboratorio, una exposición de tan sólo 3 días durante el embarazo, que es cuando el cerebro está creciendo rápidamente, redujo su tamaño un 15%.
El diclorvos también causa cáncer, según la Agencia Internacional para la Investigación sobre cancerígenos. En pruebas de laboratorio, causó leucemia y cáncer pancreático. Dos estudios independientes han demostrado que los niños expuestos en casa a tiras insecticidas que contienen diclorvos presentan una mayor incidencia de cáncer cerebral que los niños no expuestos32”. [énfasis añadido] Tenga en cuenta las partes resaltadas en negrita.
La exposición al Naled provoca un incremento de la agresividad y deterioro de la memoria y el aprendizaje. Estos son también algunos de los síntomas que se encuentran en los niños con trastorno del espectro autista.
Uno de los productos de degradación más tóxicos del Naled es el diclorvos. Este producto causó una reducción del 15% en el tamaño del cerebro en las crías de los animales de laboratorio preñados después de 3 días de exposición. Otra palabra para designar un cerebro reducido es microcefalia.
Por lo tanto,
el pesticida que se está fumigando podría aumentar las tasas de autismo en los niños de la zona y también podría provocar microcefalias en los bebés de las mujeres que están embarazadas.
Pregunta: de haber bebés nacidos con microcefalia en Miami en los próximos nueve meses o si las tasas de autismo en la zona de fumigación aumentasen, ¿se va a culpar al Zika o al Naled? Estoy seguro de que nadie de los CDC, o de otra agencia de salud pública, apuntará con el dedo al Naled. Utilizarán a esos niños para probar sin ninguna sombra de duda de que el culpable es el virus del Zika.
El Naled también es perjudicial para los adultos
El Dr. Naresh Kumar, profesor de Salud Pública de la Universidad de Miami, comentó sobre los riesgos de la utilización de pesticidas en la fumigación aérea. Sus declaraciones aparecieron en la CBS de Miami:
“Se trata de neurotoxinas, lo que significa que afectarán directamente a nuestro sistema nervioso. Afectarán no sólo a las mujeres embarazadas… sino también a los niños que tienen asma y enfermedades de las vías respiratorias, porque cuando su realiza una fumigación aérea, estos aerosoles permanecen en el aire durante al menos cinco días” 35.
El Miami Herald da algunos consejos a las personas que se encuentran en la zona de fumigación:
“La Agencia de Protección Ambiental (EPA) dice que este insecticida no supone ningún riesgo para la mayoría de las personas, pero los que son sensibles a los productos químicos debieran permanecer en el interior durante la pulverización, cerrando las ventanas y desconectando el aire acondicionado. Las frutas y verduras también deben lavarse antes de su consumo y los muebles de jardín situarse en una zona cubierta” 36.
Por lo tanto, si usted se muestra preocupado por la exposición a los productos químicos que se fumigan, entonces debería permanecer en el interior de la vivienda durante 5 días, hasta que hubiese descendido la concentración del insecticida en el aire. Debería mantener las ventanas cerradas, y desconectar el aire acondicionado. Me pregunto cuántas fueron las personas que siguieron estos consejos en Miami durante el mes de agosto, con su clima subtropical.
Los programas de control mental siempre intentan hacer la vida más difícil de aquellas personas que no se ajustan a un supuesto patrón de normalidad. Pretenden que se sigan sus instrucciones, que en este caso simplemente se trataría de no preocuparse por las fumigaciones. Pero si se muestra preocupado, entonces puede seguir unas sugerencias ridículas, que realmente no le van a proteger ni de las salpicaduras.
¿El Zika no provoca también el síndrome de Guillain-Barré?
Al parecer, los CDC sospechan que el Zika también puede provocar un síndrome paralizante denominado de Guillain-Barré. Si nos fijamos en los formularios de recogida de datos para la vigilancia del Zika en los Estados Unidos, se podrá observar otra obra maestra de control mental: se registran también los casos de síndrome de Guillain-Barré en el mismo formulario donde se recogen los casos de Zika 37.
¿Por qué los CDC piensan en esta conexión? Los CDC indican en su página que no están seguros de qué es lo que causa el Síndrome de Guillain-Barré. Mencionan que hubo algunos casos de Síndrome de Guillain-Barré asociados a la vacuna contra la gripe porcina en 1976, pero que en el resto de casos la etiología es desconocida 38.
Si pudieren establecer una conexión entre el virus del Zika y el Síndrome de Guillain-Barré, entonces se podría desviar la atención sobre el hecho de que muchas vacunas y pesticidas tienen un efecto perjudicial sobre el sistema nervioso humano y son capaces de provocar este tipo de parálisis.
Creo que este trabajo de investigación sobre el Síndrome de Guillain-Barré va a seguir los mismos derroteros que la investigación de la microcefalia. Sólo se trata de sustituir una palabra por la otra. Se mostrará a través de dudosos datos estadísticos que el virus del Zika también provoca el Síndrome de Guillain-Barré, además de microcefalia.
De hacer buenos sus propósitos, entonces se echará al virus del Zika toda la responsabilidad de los daños producidos por las vacunas, esclareciendo los casos de microcefalia y de parálisis.
De hacer buenos sus propósitos, los fabricantes de plaguicidas también podrán culpar al virus del Zika de los casos de microcefalia, de las malformaciones neurológicas y de las parálisis que resulten del uso de sus productos.
El virus del Zika puede llegar a convertirse en el chivo expiatorio perfecto.
El número de defectos de nacimiento está aumentando, y se están achacando al virus del Zika sin sólidas evidencias
Las campañas de propaganda siempre intentan aumentar los efectos devastadores de aquello sobre el objeto de su campaña. Primero dijeron que el Zika causa microcefalia. Luego empezamos a oír que también puede provocar el Síndrome de Guillain-Barré. Ahora ya estamos oyendo que el Zika podría provocar otros muchos defectos de nacimientos, algunos de los cuales no harían su aparición hasta algunos meses o después de algunos años del nacimiento.
The New York Times señalaba:
“La imágenes (de los bebés con microcefalia), que aparecieron el martes en la revista Radiology también sugieren otra posibilidad sombría: debido a que algunos de los daños se observaron en áreas del cerebro que continúan desarrollándose después del nacimiento, pudiera ser que los bebés que nacen sin aparentes defectos de nacimiento, los experimenten a medida que crecen.
Las imágenes de otra niña con problemas en las manos y los brazos es el resultado de otro síntoma común. El Zika parece que daña los nervios en el feto en desarrollo, por lo que a veces los músculos no se desarrollan normalmente porque no son capaces de tener los impulsos nerviosos para moverse con normalidad, dijo la Dra. Levine.
Con un virus tan dañino e impredecible, es importante darse cuenta de que el Zika es algo más que los casos de microcefalia, que se producen otras anomalías, que ya se han demostrado en este documento, y sus efectos se van a ampliar aún más, dijo el Dr. Spong, cuya agencia ha iniciado un estudio en 10.000 bebés nacidos en las zonas epidémicas de Zika de Brasil y Puerto Rico, entre otras.
Va a ser muy importante detenerse en su desarrollo, observar su capacidad de aprender, comprobar sus problemas de audición, los problemas de equilibrio, problemas de conducta, todas estas cuestiones para asegurarse de que no nos olvidamos de nada” (39).
Zika: ¿el nuevo chivo expiatorio de todas las enfermedades de la infancia?
¿A dónde pretenden llegar con todo esto? Me parece que están planeando crear todo un catálogo de las principales lesiones que resultan de la infección por el virus del Zika.
En él se incluirían la mayoría de todas las lesiones que resultan de las vacunas, de los plaguicidas, de los alimentos transgénicos, de los medicamentos, del bajo contenido en grasas de la dieta estándar y alta en carbohidratos, y cualquier otra cosa que pudiera dar lugar a una demanda contra las Grandes Farmacéuticas o la Industria Química.
El Zika podría convertirse en el estándar de la defensa de las Grandes Empresas: “No fue nuestro producto el que causó el daño en el bebé, fue el virus del Zika”.
Conclusión: ¿Otra herramienta de los Gobiernos por el bien común y en contra de nuestras libertades?
La vacunación forzosa ya se está aplicando en algunos lugares del mundo y la legislación estadounidense se está moviendo en este sentido.
No pasará mucho tiempos antes de que los principales medios de comunicación muestren fotos de bebés nacidos en Florida con microcefalia. Echarán mano de nuestra fibra sensible y nos recordarán que este horror se podrá prevenir cuando se desarrolle una vacuna contra el Zika.
Vamos a oír hablar cada vez más de las conexiones entre el Zika y muchos daños en la salud que sufren los niños. Se nos dirá que todo este sufrimiento y todos estos costes se evitarán cuando todos los mosquitos hayan sido erradicados y todos sean vacunados.
Los programas de control mental siempre hablan de un supuesto bien común aunque sea a costa de las libertades individuales: el beneficio colectivo. El Zika parece que se está convirtiendo en el pretexto para una vacunación masiva y un mayor control de nuestras vidas por parte de los Gobiernos.
SOBRE EL AUTOR: John P. Thomas escribe sobre temas de salud. Está licenciado en Psicología por la Universidad de Michigan y posee un Máster en Ciencias de la Salud Pública por la Universidad de Carolina del Norte, en Chapel Hill. FUENTE Y REFERENCIAS: noticiasdeabajo